La revelación de un ritmo físico
Dos artistas que texturizan en cuerpo los sentidos más sutiles y profundos de nuestro ser.
Las obras propuestas por esta dupla tienen la vitalidad como eje y encuentran idealmente en este entorno expositivo un eco pujante: desde lo más profundo revelan su vitalidad.
Presentan una conexión que se balancea entre aspectos múltiples, el repliegue, el latido y modos de habitar el espacio. Estas modelaciones dan su acento particular a esta polifonía a la vez que generan comunidad.
Adentrarnos en un estado de suspensión, que nos permita percibir y reconectar humildemente con nuestra piel como membrana transitable; valorar la latencia como pulso universalizador son apuestas que ambas artistas han investigado en su recorrido
Y aquí el punto: lo interno como problemática existencial.
¿a quién no lo toca un latido?
¿y la piel, ese plasma abrasante, acaso no se eriza cuando siente un corazón cercano?
El abrazo tan necesario aparece agrandado, poetizado en crisálida, expandido en túnel dérmico y brillante de luz.
Texto: Paula Bladimirsquy